Los vehículos autónomos. El futuro llegará, los automóviles autónomos estarán entre nosotros.

Los fabricantes de automóviles europeos, asiáticos y nacionales, así como Google, Uber y muchas universidades están trabajando para perfeccionar la tecnología de conducción autónoma y sin conductor, que hará que los vehículos sean más fáciles y seguros de conducir, al eliminar por completo los accidentes causados por errores humanos (que explica la mayoría de los accidentes).

El sistema “Super Cruise” de General Motors, en los modelos CT6 de 2018 a 2020, tiene una funcionalidad de piloto automático de nivel 2 (a continuación, veremos la explicación de los diferentes niveles de autonomía de conducción). El sistema de Cadillac, como otros, está diseñado actualmente para circular en autopistas de acceso controlado (sin tránsito cruzado), y no para la conducción diaria por la ciudad. Va a haber disponibilidad de Super Cruise en toda su línea. Después de 2020, Super Cruise se introducirá en otras marcas de General Motors. También hay otros fabricantes de conducción autónoma de nivel 2, Audi (Traffic Jam Pilot), BMW (Active Driving Assist Pro), Mercedes-Benz (Active Steering Assist), Nissan e Infiniti (ProPilot Assist), Subaru (Driver Focus), Tesla (Autopilot) y Volvo (Pilot Assist).

Un automóvil autónomo es el que todavía tiene un conductor humano, pero puede hacerse cargo de todas las funciones de conducción en modo de piloto automático para que el conductor pueda disfrutar de la conducción con manos libres. El conductor puede retomar el control total del vehículo en cualquier momento, ya que funciona como respaldo de seguridad en caso de que el sistema de conducción autónoma falle. Un vehículo autónomo o sin conductor, no requiere un operador humano. Es un vehículo robótico capaz de transportar personas o carga a un destino predeterminado. Se comunica con otros vehículos, controles de tránsito e Internet mediante Telemática

 Ventajas y desventajas de los automóviles autónomos.

Hay ventajas y desventajas de los vehículos autónomos y los vehículos autónomos sin conductor: los conductores alcoholizados causan aproximadamente un tercio de todos los accidentes y muertes. Si un vehículo puede reemplazar a un conductor alcoholizado, eso debería reducir la cantidad de accidentes y muertes relacionados con el alcohol. Los vehículos autónomos y sin conductor obedecerían todos los límites de velocidad y las señales de control de tránsito. Esto reduciría el peligro de exceso de velocidad en zonas de trabajo, zonas escolares y congestiones de tránsito.

La conducción con manos libres permitiría realizar otras actividades mientras viajan, como enviar mensajes de texto, leer correos electrónicos, consultar su página de Facebook, ver videos de YouTube o transmitir videos, comer, dormir o lo que sea. El conductor puede estar totalmente desconectado de la experiencia de conducción, confiando únicamente en la tecnología para dirigir su vehículo a destino. Se convierte en un pasajero más.

Esto está bien para un vehículo que es verdaderamente autónomo y puede conducirse solo de principio a fin, pero puede no ser tan seguro para un vehículo que puede devolver el control al conductor en un momento inoportuno cuando el conductor se distrae con alguna otra actividad.

Los vehículos totalmente autónomos que no necesitan conductor en absoluto (ni siquiera para un respaldo) llegarán una vez que la tecnología de conducción autónoma se haya probado, pero podría haber importantes consecuencias económicas. Los taxis no necesitarían taxistas. Los camiones no necesitarían conductores. Los micrómnibus no requerirían conductores. Esto podría dejar personas sin trabajo que actualmente están empleadas en estas ocupaciones. En teoría, los camiones sin conductor podrían funcionar las 24 horas del día (o hasta que tuvieran que detenerse para cargar combustible), lo que reduciría el costo de transporte. Habría menos accidentes de automóviles y camiones porque no habría conductores de camiones cansados, distraídos o enojados detrás del volante.

 Los autos de prueba de conducción autónoma de Google utilizan distintas tecnologías para monitorear la ubicación del vehículo, el tránsito y las condiciones de manejo.

¿Cuándo estarán disponibles los automóviles autónomos y sin conductor?

La tecnología ya ha demostrado que no se necesita un conductor humano para conducir un vehículo. El piloto automático de Tesla es nivel 2 puede conducir el vehículo en muchas (pero no todas) situaciones de conducción. Otros fabricantes de vehículos están desarrollando y probando sus propios vehículos autónomos. Audi envió un automóvil sin conductor al pico Peak a velocidades de carrera y camino de montaña sin salir de la ruta, por lo que no hay duda de que la tecnología funciona en las condiciones adecuadas. Por esto, no hay ninguna razón por la que no se pueda utilizar la misma tecnología para guiar, dirigir y frenar vehículos en la autopista o en el tránsito urbano.

El entorno urbano es mucho más desafiante debido al tránsito cruzado, los semáforos, las señales de alto, los peatones y otros vehículos que se detienen, giran y no siempre obedecen las normas. La mayoría de los prototipos de automóviles autónomos sin conductor requerían un baúl lleno de computadoras, cámaras y antenas para navegar por sí mismos. Pero a medida que la tecnología evoluciona, se vuelve más pequeña, más eficiente, más confiable y más barata de fabricar. Los primeros sistemas solo estarán disponibles en vehículos de lujo, pero a medida que bajen los costos, la tecnología probablemente se extenderá a todos los automóviles, al igual que los airbags, el ABS, los sistemas de monitoreo de presión de los neumáticos y el control de estabilidad ESP.

Esto, significaría que automóviles manejados manualmente estarían restringidos a ciertos tipos de autopistas o prohibidos en áreas urbanas congestionadas donde los semáforos podrían convertirse en cosa del pasado. Con sistemas de control de conducción totalmente automatizados y comunicación entre vehículos, muchas calles urbanas podrían manejar mayor cantidad de vehículos con seguridad. Lo mismo para las autopistas. Un automóvil autónomo o un vehículo autónomo tiene seguridad redundante para evitar que el automóvil pierda el control debido a una falla electrónica o un problema técnico. El sistema tendría que devolver el control (con la advertencia adecuada) al conductor, o si no hubiera conductor, sacar el vehículo de la calle y detenerlo.

¿Quién es responsable si un automóvil que se conduce solo se ve involucrado en un accidente o choca?

 ¿A quién demandaríamos? ¿Al propietario del vehículo? ¿Al fabricante del vehículo? ¿La empresa que diseñó el sistema de conducción autónoma? ¿Cómo se aseguraría un vehículo así? Si un vehículo puede conducirse solo y navegar de A a B, debe realizar un seguimiento de su ubicación en todo momento. Esto significa que el camino de un vehículo se puede rastrear fácilmente. Los padres pueden realizar un seguimiento de sus hijos adolescentes.  La policía o el gobierno podría controlar los viajes de varias personas. ¿Quién tendría acceso a esta información? ¿Solo la ley? ¿Solo Google? ¿O alguien más? ¿Se podría piratear la información? ¿Se establecerían reglas para restringir el uso de este tipo de información?

 Todos estos son problemas deben abordarse y resolverse. Habrá pasos en falso y errores cometidos en el camino, pero llegarán automóviles sin conductor y vehículos autónomos sin conductor. Es solo una cuestión de tiempo. Quizás dentro de 20 o 25 años, la mayoría de los vehículos en la ruta tendrán capacidad de conducción autónoma o serán completamente autónomos.

Los únicos lugares donde los conductores aún podrán necesitar un volante serán en caminos rurales remotos, cuando conduzcan fuera de la ruta o en una pista de carreras.  La Administración Nacional de Seguridad del Tráfico en las rutas (NHTSA, USA) clasifica los vehículos de acuerdo con su nivel de sofisticación, desde el Nivel 0 (sin automatización) hasta el Nivel 4, que es la automatización de conducción autónoma total. Un vehículo de Nivel 4 sería uno que está diseñado para realizar todas las funciones de conducción críticas para la seguridad y monitorear las condiciones de la ruta durante todo un viaje.

La única entrada programable por el conductor sería la entrada de destino o navegación, o para reanudar el control del vehículo en caso de que ocurriera una falla en el sistema de guía. Los vehículos que no requieren la intervención del conductor para varias funciones pueden ser beneficiosos, y algunas encuestas de consumidores muestran que a los conductores buscan características como el control de crucero adaptativo, el frenado de emergencia y la asistencia de estacionamiento.

En Abril de 2.014, el proyecto “Drive Me” de Volvo puso 100 automóviles autónomos en las rutas suecas Volvo desarrolló el primer proyecto piloto de conducción autónoma a gran escala del mundo.  El proyecto tiene el apoyo del gobierno sueco, que considera que los vehículos autónomos son una forma de reducir los accidentes y mejorar la seguridad en la ciudad y las rutas. Los comentarios del proyecto piloto del mundo real, ayudarán a Volvo a perfeccionar la tecnología que eventualmente se incorporará a los vehículos de producción.

El objetivo es que el automóvil pueda manejar todos los escenarios de tránsito posibles por sí mismo, incluido un lugar seguro para detenerse si el conductor no puede recuperar el control. El proyecto “Drive Me” se centrará en una serie de áreas, que incluyen: cómo los vehículos autónomos aportan beneficios sociales y económicos al mejorar la eficiencia del tránsito, el entorno y la seguridad vial, requisitos de infraestructura para la conducción autónoma, situaciones de tránsito típicas adecuadas para vehículos autónomos, la confianza del consumidor en los vehículos, cómo los conductores de los alrededores interactúan sin problemas con un automóvil de este tipo.

En 2015 Tesla fue el primero en ofrecer control de crucero con piloto automático Tuvo el primer sistema de “piloto automático” que es totalmente capaz de conducir, dirigir y frenar el automóvil en un modo de control de crucero especial. Aunque este sistema no es un automóvil autónomo en toda regla (solo nivel 3), está bastante cerca. Permite la conducción con manos libres en muchas situaciones. El sistema de piloto automático se envió vía Internet a los propietarios de Tesla como una descarga de actualización. Permite que el Model S conduzca dentro de un carril, cambie de carril con el simple toque de una señal de giro y controle la velocidad mediante el control de crucero activo. 2.020 fue el primer año de producción de automóviles autónomos. Audi, Tesla, Toyota y otros fabricantes de automóviles quieren producir vehículos que sean totalmente capaces de cumplir con las capacidades de conducción autónoma de “Nivel 4″.

El nivel 4 significa que el automóvil puede conducir solo desde el punto A hasta el punto B sin ninguna intervención del conductor más que dar instrucciones generales sobre el lugar al que quiere ir. Las comunicaciones de vehículo a vehículo tendrán un papel importante en la conducción autónoma, al igual que las comunicaciones de vehículo a infraestructura.

 Los vehículos totalmente autónomos deben realizar una variedad de tareas más allá del control de velocidad, control de dirección y frenado. Deben conocer su ubicación exacta (a través de GPS) en la ruta, deben determinar y mantener la posición correcta de su carril en calles y rutas de varios carriles, deben reconocer otros vehículos, peatones, ciclistas, automóviles, animales, peligros en la ruta, semáforos y señales de tránsito (y reaccionar en consecuencia para evitar accidentes)

 Aunque se supone que los vehículos autónomos mejoran la seguridad, ha habido una serie de contratiempos y accidentes atribuidos a la tecnología. Si un automóvil se conduce solo, tendemos a confiar demasiado en la capacidad del sistema para reaccionar ante cualquier cosa que pueda estar obstruyendo la ruta. Entonces dejamos de actuar como conductores y comienzan a comportarnos más como pasajeros pasivos. Quitamos la vista de la ruta, comemos, enviamos mensajes de texto, miramos videos, dormitamos, muchas veces con consecuencias mortales. Todo esto debe ser acompañado por un sistema vía Web que funcione a la perfección, junto a un trazado de señales en rutas y ciudades permanente, algo que en muchos países tardará décadas en concretarse.

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